Son muchas, muchísimas, las excursiones que se pueden plantear por los wadis que se adentran por el norte a las Hajar, muchas de ellas con vistas a la impresionante pared norte de Jebel Shams, la montaña más alta de Omán ("Montaña del sol", 2980 m.). Desgraciadamente, esta zona no es sitio para adentrarse con otra cosa que no sea un todoterreno. Y el calor, aunque en la montaña es llevadero, aprieta demasiado como para pegarse las pateadas que implicarían el acercamiento más la excursión en sí. Así que por el momento hay que conformarse con adentrarse un poco por el wadi, reconocer el terreno y pegarse un chapuzón en la primera poza que se preste a ello. La ventaja de operar así es que tienes para ti solo las pozas que la gente normalmente se salta por estar antes del punto hasta el que se puede llegar con vehículo. La desventaja es que siempre te toca tragar algo de polvo cuando compartes pista con los todoterreno y te cruzas con uno.