domingo, 17 de mayo de 2015

Memorias sultanatas: buceando en Sira Island.

Normalmente los centros de buceo programan dos inmersiones consecutivas para aprovechar el viaje en barco. Las limitaciones de la segunda inmersión vienen dadas por el nitrógeno que aún tengamos disuelto en la sangre, y esto depende del tiempo y profundidad de la primera inmersión y del intervalo de tiempo en superficie entre ambas. En entornos coralinos la cosa pinta muy bien, porque precisamente lo interesante está a bajas profundidades, donde llega la luz. Así que con un poco de tiempo que se eche en el viaje en barco de un punto a otro se está en condiciones de disfrutar de dos inmersiones de 50 minutos bajando hasta 20 metros. Así que a gozar de nuevo.

Tortugas ya desde la embarcación. Buena señal.
Paisaje general con un montón de corales mesa (Acropora), y en el medio un pez mariposa arábigo (Chaetodon Melapterus)
Para ver corales es mejor el buceo nocturno, pero algunos despliegan sus tentáculos por el dia también. Lo de la derecha supongo que es un crinoideo, pero a saber; lo de los invertebrados es un mundo.
Donde hay anémona hay pez payaso y viceversa, eso es del capítulo 1.  Esta gente lo tiene muy bien organizado: el mayor del grupo siempre es la hembra. Cuando se muere, el macho de mayor tamaño se convierte en hembra y asunto solucionado.
Estos parece que se están yendo por el desagüe.
Esto lo vi por primera vez buceando en Benidorm y luego el gran Ricardo Roberto Fernández me explicó qué es: la trompa de la hembra del gusano Bonella Viridis, que andará por ahí oculta igual dos metros más allá. El macho es como cien veces menor y vive en el interior de la hembra. Con los invertebrados es así todo, no sabe uno si es mejor no enterarse.
Un pez ángel emperador tan ricamente a la sombra.
Las sepias son siempre hipnóticas. Verlas cambiar de color es alucinante. Y tampoco hace falta ser buceador, sólo ir al sitio adecuado y tener un poco de paciencia y suerte. No tendrá uno disfrutado con ellas en Perlora... Lo que no hay por aquí es pulpos y eso es un punto muy serio en contra.

Un par de tipos de serpiente marina.

Los corales blandos morados parecen específicos de zonas concretas; en "Aquarium" no había. Los tenemos visto a montones en alguna inmersión en Musandam.
Esto es una estrella corona de espinas, el mayor enemigo de los corales. Ha acabado con ellos en algunas zonas.
Y ya en superficie, un banco de agujas. Un clásico.